domingo, 30 de diciembre de 2012

Iluminada (Enlightment)

Altamente recomendable esta serie de HBO creada, producida y protagonizada por Laura Dern. Iluminada trata sobreAmy (Dern) que vive un renacer tras recuperarse de su adiccion a las drogas, la que compartia con su ex esposo (Luke Wilson).
Amy vuelve a empeza, y para ello vuelve a vivir a la casa de su madre y vuelve a conseguir su antiguo trabajo. Pero este es el punto de partida de una serie que va mas alla. No se queda en el lugar comun de una historia de rehabilitacion y redencion en el medio del estilo de vida norteamericano, sino que trata sobre nuestra forma de encarar la vida, nuestro relacionamiento con nuestra familia, con la gente con la que trabajamos, con nuestras parejas, nuestros fracasos y exitos.
Con tanta series y peliculas llenas de explosiones, persecuciones, volencia desmedida, intrigas, o melodramas algo rebuscados, es una bocanada de aire fresco ver una serie que trata de lo que nos pasa dia a dia, que nos permita refleccionar y pensar.
Los invito a verla.
Los capitulos gozan del talento de distintos directores. Entre ellos, veran a Jonathan Demme (El silencio de los inocentes), Miguel Arteta (The good girl),  MikeWhite (Escuela de Rock), este ultimo tambien productor de la serie.
Iluminada gano un racimo de Globos de Oro en el 2011 (incluida Dern como mejor actriz) y ya tiene preparada su segunda temporada, a estrenarse en febrero de 2013.
Pueden verla por HBO. Estan pasando maratones de la serie.

domingo, 4 de noviembre de 2012

OPERACIÓN SKYFALL




Ficha: Película: Skyfall. AKA: 007 Skyfall / Bond 23. Dirección: Sam Mendes. Países: Reino Unido y USA. Año: 2012. Duración: 143 min. Género: Acción, thriller. Interpretación: Daniel Craig (James Bond), Judi Dench (M), Bérénice Marlohe (Sévérine), Javier Bardem (Silva), Ralph Fiennes (Gareth Mallory), Ben Whishaw (Q), Naomie Harris (Eve), Helen McCrory (Clair), Albert Finney (Kincade), Ola Rapace (Patrice). Guion: John Logan, Neal Purvis y Robert Wade; a partir de los personajes creados por Ian Fleming. Producción: Barbara Broccoli y Michael G. Wilson. Música: Thomas Newman. Fotografía: Roger Deakins. Montaje: Stuart Baird. Diseño de producción: Dennis Gassner. Vestuario: Jany Temime.




Sinopsis: En “Skyfall”, la lealtad de James Bond hacia M será puesta a prueba cuando el pasado de M vuelve para atormentarla. Su vida se verá en peligro, de modo que el agente 007 deberá localizar y eliminar la amenaza, sin importar el precio personal que tendrá que pagar. Tras el fracaso de la última y fatídica misión de Bond y revelarse la identidad de varios agentes secretos en distintos puntos del planeta, la sede del MI6 es atacada, obligando a M a trasladar su agencia. Debido a estos sucesos, su autoridad y posición se verán amenazados por Mallory, el nuevo Presidente del Comité de Inteligencia y Seguridad. Ahora, el MI6 se enfrenta a amenazas tanto externas como internas por lo que M decide acudir al único aliado en quien puede confiar: Bond. El agente 007 desaparece en las sombras con una única aliada: la agente de campo Eve. Juntos le seguirán la pista al misterioso Silva, cuyas letales y ocultas motivaciones están aún por desvelarse. (Fuente: labutaca.net)




Comentario: La nueva película de la saga me produjo una serie de impresiones encontradas. Y quizás por eso sea más fácil comentar las que me resultaron positivas, y las otras…
Entre las positivas, más allá de poder volver a ver en el cine (después de la crisis de los estudios que puso un freno a la producción) un nuevo film del agente secreto al servicio de su majestad, se destacan las escenas de acción, muy bien realizadas y creíbles. El film es bueno en general, y entretiene.




Las otras…
Para comenzar, la historia es tan simple que bordea lo flojo. Luego de la excelente Casino Royale y su decepcionante sucesora, quizás los productores y guionistas pensaron que era mejor escribir una trama simple, y volver a dotar a la saga de elementos originales. Si en las dos primeras películas de esta nueva etapa, con Craig como protagonista, se había tendido hacia el realismo más crudo en la trama, escenas y ambiente en general, sumado a historias con una cierta complejidad, aquí se volvió a las bases sumando aquellos viejos elementos y una historia endeble. El resultado fue la vuelta de Q, de Moneypenny, el Aston Martin con sus ametralladoras, y varios de los puntos clásicos… Habrá que ver en el futuro si esta vuelta a lo más básico de 007 tiene algún beneficio. El realismo que se había logrado en estas nuevas películas era lo que actualizaba la saga en estos tiempos.

Breve spoiler alert
También pesan los lugares comunes en todo lo que es argumento del film. Ya vimos la historia del villano que es un ex agente que quiere vengarse (Goldeneye) del M16, y también vimos aquello del villano que se deja atrapar para crear un caos interno y lograr algún propósito particular entre sus carceleros (The Dark Knigth).

También vimos en muchas películas aquel argumento de un grupo terrorista que roba una lista con las identidades de los agentes secretos… En realidad, la trama parece un compilado de lugares comunes que ya vimos en otros films de acción. Pero lo peor es, quizás, la resolución apurada y simple de la historia. Aquí no existe aquella buena pluma de Nolan y los suyos en la nueva saga de Batman… en Operación Skyfall la historia llega a un clímax y luego se resuelve de una manera tan sencilla que decepciona. Lo previsible y mal resuelto de la historia choca con la actuación de Bardem, que merecía un mejor contexto. Una buena trama hizo que Heath Ledger se consagrara en el film de Nolan, y aquí lo flojo de la misma produce que el rol de Bardem quede desdibujado. Aún así, pareciera que es más la fuerza y el papel del terrorista interpretado por Bardem lo que hace interesante al personaje, que la actuación del español.




De todas formas, más allá de estos elementos que hubieran podido evitarse, el film entretiene, y así logra su objetivo principal. Está bien dirigido y bien realizado en general, y las actuaciones son correctas. Es buena, pero podría haber sido mucho mejor.

Mi opinión: BUENA



domingo, 30 de septiembre de 2012

Macbeth


Macbeth, historia de la enferma ambición por el poder y del devastador peso que este puede acarrear.
No hay seguridad absoluta de que esta tragedia sea en su totalidad obra de Shakespeare, ya que algunos afirman que ciertos pasajes podrían ser adiciones posteriores del dramaturgo Thomas Middleton, cuya obra La bruja (The witch) tiene múltiples afinidades con Macbeth.
La obra está libremente basada en el relato de la vida de un personaje histórico, Macbeth, quien fue rey de los escoceses entre 1040 y 1057. La trama esta centrada en el ascenso al trono de un noble escocés, al que accede mediante el asesinato, orquestado por este último e impulsado por su inescrupulosa esposa, del hasta entonces rey.
Por suerte, no me canso de repetir, Buenos Aires cuenta con un teatro municipal que permite acceder a estos maravillosos clásicos que nunca pierden actualidad.
En el caso, nos encontramos con una puesta moderna, ecléctica, con una escenografía consistente en andamios y caños con los que parece se quisiera fusionar castillos reales escoceses con fábricas modernas; utilería que reemplaza espadas medievales por escopetas y revólveres, vestuario que en vez de armaduras y atuendos reales ofrece uniformes militares y decadente ropa de gala; un sonido estruendoso, por momentos abrumador, que acentúa la oscuridad de la atmosfera que propone la historia. En el medio, coreografías con movimientos espasmódicos, mujeres vestidas al estilo gótico en un estado orgiástico cual ménades acechando a su presa, y el elenco masculino con el torso desnudo componiendo un "ballet-oráculo" que presagia la tragedia.
Con esta ambientación, Javier Daulte, uno de los mejores y mas prolíficos directores de la escena nacional, ofrece su versión de la obra que motiva este comentario.
Antes de ir al teatro, leí las críticas de los diarios de mayor tirada del país, quienes no vacilaron en calificar la obra como excelente, o muy buena, lo que despertó aun más mi curiosidad por verla.
Lamentablemente, no puedo coincidir con la crítica especializada y profesional en este caso. Mi honestidad intelectual me lo prohibe. Si bien la puesta es interesante -aunque, en lo personal, no soy muy adepto a las versiones "modernosas" de los grandes clásicos- hay innegables cuestiones que atañen a la dirección y a las interpretaciones que, el mismo Daulte reconocería, alejan a la obra de la excelencia que se le pretende asignar.
El primero, y con mucho pesar debo expresar, se encuentra en la dicción de los intérpretes. Cuando se decide hacer Shakespeare, los actores deben pronunciar los textos con la cadencia que estos proponen y, sobre todo, modulando de un modo extremadamente prolijo. Si no, la armonía se perderá, el sentido y el mensaje se perderán, y solo se escucharán bonitas palabras rebotando en la escenografía, volando a bambalinas, que nunca llegarán a la sala. Y eso se consigue con trabajo y tiempo, del director y de los actores.
En tiempos en que la dicción y la armonía del lenguaje, de la palabra en especial, estan en crisis, mayor es el trabajo que debe hacer el director para que los textos expresen un contenido. De lo contrario, se cae en la trampa de confundir el histrionismo exhacerbado con una buena actuación, o bien en aquella que lleva al actor a pensar que los textos clásicos se resuelven a traves de la declamación.
Aquí, los actores hacen un gran esfuerzo por resolver el desafío de componer tan complejas criaturas que se encuentran siempre al límite. Pero se los ve solos, sin la guía necesaria sobre cómo decir y, quizá lo más importante, cómo componer. Pareciera que se armó la puesta y luego se dejó a los actores a la deriva.
Declaman, gritan, por momentos actúan solo cuando les toca decir los textos, que quedan vacíos en labios de actores que parecieran no sentir ni entender lo que dicen. Saben que deben estar enojados, eufóricos, desesperados, pero no lo asimilan, lo que genera una llamativa ausencia de climas.
El primer ejemplo de esto lo da el prótagonico a cargo de Alberto Ajaka, quien basa su lineal interpreación en un estado de desesperación y enojo permanente, tan descontrolado que por momentos le impide decir con claridad los textos. No hay matices, es siempre exaltación.
Lady Macbeth es un personaje transcendental en la historia. Se trata de la conjuradora del crimen, aquella que traza el plan para que su marido dé muerte al Viejo rey y se haga con el trono. Sin embargo, Macbeth se muestra incapaz de acabar con la vida del monarca, por lo que es élla quien se encarga de asesinarlo. Para tan exigente papel, se requiere una actriz con una potencia dramática y una presencia escénica notable. Por ello, no fue en lo mas mínimo acertado convocar a una casi novata en las tablas Monica Antonópulos, que si bien obtuvo reconocimientos en televisión, debió considerar que, para arrancar, Lady Macbeth no era el papel indicado. Antonopulos luce hermosa y seductora, hecho ajeno a toda duda, pero también daclama y hasta en varias oportunidades tartamudea. En varios momentos se la ve demasiado concentrada en salir adelante con este desafío (un protagónico de teatro clasico en el San Martin) y eso la lleva a perder el personaje, el que de vez en cuando logra retomar. Hay un momento muy logrado, aquel en el cual la reina, sonámbula, lucha con los fantasmas de los muertos que lastiman su conciencia. Pero, en el todo, no pasa de una interpretación poco convincente y hasta fingida, nada propia a quien debe integrar un elenco profesional.
Luciano Caceres, en el rol de McDuff, el antagonista de Macbeth, alcanza una aburrida corrección, que a veces quiebra intentando llamar la atencion del público con innecesarios graznidos o gestos efectistas.
Esto viene enlazado a otro tema mas genéico, que ya hace a la concepción que productores y gente de teatro tiene del público en la actualidad. Da la sensación de que existe cierta subestimación del público que suele acudir al teatro en general, y al San Martin en especial, como que existiera una necesidad de atraer la atención de la gente, que de lo contrario no disfrutaría de una puesta clásica de la dramaturgia universal. Lo cual se ve evidenciado por el hecho de adaptar el texto para que los personajes se tuteen o pronuncien la "y" aporteñada, o bien, lo que me generó mas sorpresa, por la incorporación de un monólogo al estilo "stand up" entre dos actos, en el que uno de los personajes del elenco juega con que los "porteros" de los edificios reclaman llamarse "encargados".
En lo que hace a la escenografía, si lo que se buscaba era lograr un ambiente opresivo, lúgubre, propio de la trágica secuencia de hechos que brinda la historia, el objetivo se logra con creces mediante la ambientación elegida de tonos, como ya refiriera, de tipo industrial. Un acierto que no debe dejar de destacarse es el de la iluminación, siempre precisa y adecuada para cada situación.
Mas allá de los desaciertos apuntados referidos sobre todo a la direccion de actores, no deja de ser una puesta interesante a la hora de elegir en la cartelera portena. Ademas, siempre vale la pena escuchar esos textos inmortales que, con mayor o menor calidad en lo interpretativo, son y serán una caricia para el alma.
Trivia: a no pronunciar el título de la obra, en el mundo del teatro se lo considera de mal agüero. 

miércoles, 22 de agosto de 2012

La educación prohibida

 
Ficha: Investigación y Guión: German Doin,Verónica Guzzo; Plataformas Colaborativas: Franco Iacomella, Cintia Paz; Asistentes: Fernanda Blanc, Oscar Fernando Borrero; Realización Integral: German Doin; Montaje: German Doin,Verónica Guzzo.
Sinopsis: La escuela ha cumplido ya más de 200 años de existencia y es aun considerada la principal forma de acceso a la educación. Hoy en día, la escuela y la educación son conceptos ampliamente discutidos en foros académicos, políticas públicas, instituciones educativas, medios de comunicación y espacios de la sociedad civil.Desde su origen, la institución escolar ha estado caracterizada por estructuras y prácticas que hoy se consideran mayormente obsoletas y anacrónicas. Decimos que no acompañan las necesidades del Siglo XXI. Su principal falencia se encuentra en un diseño que no considera la naturaleza del aprendizaje, la libertad de elección o la importancia que tienen el amor y los vínculos humanos en el desarrollo individual y colectivo.A partir de estas reflexiones críticas han surgido, a lo largo de los años, propuestas y prácticas que pensaron y piensan la educación de una forma diferente. “La Educación Prohibida” es una película documental que propone recuperar muchas de ellas, explorar sus ideas y visibilizar aquellas experiencias que se han atrevido a cambiar las estructuras del modelo educativo de la escuela tradicional.Más de 90 entrevistas a educadores, académicos, profesionales, autores, madres y padres; un recorrido por 8 países de Iberoamérica pasando por 45 experiencias educativas no convencionales; más de 25.000 seguidores en las redes sociales antes de su estreno y un total de 704 coproductores que participaron en su financiación colectiva, convirtieron a “La Educación Prohibida” en un fenómeno único. Un proyecto totalmente independiente de una magnitud inédita, que da cuenta de la necesidad latente del crecimiento y surgimiento de nuevas formas de educación (Fuente: sitio web www.educacionprohibida.com).
Comentario: Les recomiendo esta película. Muy interesante, para pensar. Es larga, por eso quizas convenga verla en dos veces, pero no se la pierdan. Acá les dejo el link donde pueden verla:
http://www.educacionprohibida.com/
 
 
 

miércoles, 8 de agosto de 2012

CUANDO LOS CHANCHOS VUELEN



Ficha: Dirección Sylvain Estibal. Guión Sylvain Estibal. Protagonistas Sasson Gabai, Baya Belal, Myriam Tekaïa, Gassan Abbas, Khalifa Natour, Lotfi Abdelli, Ulrich Tukur, Khaled Riani, Uri Gabay. Director de Producción Jean-Philippe Blime, Franck Chorot, Benito Mueller, Wolfgang Müller, Jean-Jacques Neira, Hubert Toint. Fotografía Romain Winding. Música Aqualactica y Boogie Balagan. Montaje Damien Keyeux. 




Sinopsis: Jafaar, un pescador palestino pobre, se lleva la sorpresa de su vida cuando encuentra un chancho atrapado en su red luego de una tormenta. Debe entonces deshacerse del impuro animal enseguida, antes de que las autoridades lo descubran, pero no puede resistirse a la oportunidad de poder hacer un poco de dinero fácil. Cuando un oficial de Naciones Unidas se niega a comprarle el chancho, Jafaar encuentra una manera de explotar las habilidades reproductivas de su nuevo amigo en el lugar más impensado de todos.




Comentario: Hermosa película de Sylvain Estibal. La película narra la historia de Jafaar, un pobre pescador palestino que vive en la Franja de Gaza, y que no tiene mucha suerte. No le va bien en la pesca, y en la terraza de su casa tiene apostados dos militares vigías israelíes. Una tarde, tras una tormenta, aparece en sus redes un chancho barrigón, causándole el susto de su vida. Una vez repuesto, y tras pensar varias opciones, Jafaar intentará sacarle provecho al animal, considerado impuro entre palestinos e israelíes. El tono del relato es de comedia, logrando más de una sonrisa, y sobre todo despertando la simpatía por el desventurado Jafaar. Sin embargo, el contexto de fondo es complejo: soldados israelíes de un lado, palestinos del otro, fundamentalistas islámicos… y en el medio Jafaar y su criatura. Irónicamente, será el chancho quien aparecerá como figura vinculante entre ambos bandos. Por momentos la comedia da paso a situaciones complicadas al reflejar antagonismos y duras situaciones entre los dos pueblos; culminando con un mensaje pacifista. Algunos pensarán que se simplifica un conflicto doloroso y complicado; pero creo que el mensaje es válido. Muchos que no sabían demasiado sobre la situación política en Gaza la verán de una forma distinta. Mención aparte merece la actuación de Sasson Gabai como Jafaar: su trabajo es excelente. En definitiva, una muy linda película.

Opinión: MUY BUENA



jueves, 2 de agosto de 2012

BATMAN: EL CABALLERO DE LA NOCHE ASCIENDE



 
Ficha: Título original: The Dark Knight rises. Dirección: Christopher Nolan. Países: USA y Reino Unido. Año: 2012. Duración: 164 min. Género: Acción, thriller. Interpretación: Christian Bale (Bruce Wayne/Batman), Tom Hardy (Bane), Gary Oldman (James Gordon), Anne Hathaway (Selina Kyle/Catwoman), Morgan Freeman (Lucius Fox), Michael Caine (Alfred), Marion Cotillard (Miranda Tate), Joseph Gordon-Levitt (John Blake), Daniel Sunjata (agente de operaciones especiales), Josh Pence (joven Ra’s Al Ghul), Diego Klattenhoff (policía novato), Nestor Carbonell (alcalde de Gotham City), Juno Temple (Holly Robinson), Matthew Modine  (Foley), Christopher Judge. Guion: Jonathan Nolan y Christopher Nolan; basado en un argumento de David S. Goyer y Christopher Nolan; a su vez basado en los personajes creados por Bob Kane. Producción: Christopher Nolan, Charles Roven y Emma Thomas. Música: Hans Zimmer. Fotografía: Wally Pfister. Montaje: Lee Smith. Diseño de producción: Nathan Crowley. Vestuario: Lindy Hemming.




Sinopsis: Han pasado ocho años desde que Batman desapareciera en la oscuridad, convirtiéndose, en ese instante, de héroe en fugitivo. Al asumir la culpa por la muerte de Harvey Dent, el Caballero Oscuro lo sacrificó todo por lo que considera, al igual que el Comisario Gordon, un bien mayor. La mentira funciona durante un tiempo, ya que la actividad criminal de la ciudad de Gotham se ve aplacada gracias a la dura Ley Dent. Pero todo cambia con la llegada de una astuta gata ladrona, que lleva a cabo un misterioso plan. Sin embargo, es mucho más peligrosa la aparición en escena de Bane, un terrorista enmascarado cuyos despiadados planes para la ciudad hacen que Bruce regrese de su autoimpuesto exilio. Pero a pesar de volver a ponerse el traje, es posible que Batman no sea suficiente para combatir a Bane.

El Batman de los 60
 Comentario: Con el paso del tiempo, el séptimo arte fue tomando cada vez más en serio las adaptaciones de los cómics; área que mueve millones y millones de dólares y seguidores en todo el mundo. La historia del millonario convertido en vigilante a raíz de haber presenciado el asesinato de sus padres cuando era niño, tuvo dispares resultados en su versión cinematográfica. En 1966 Leslie H. Martinson dirigió una versión para el cine del Batman naif de los ´60, personificado por Adam West. El Batman de esa época bailaba, se peleaba coreográficamente y podía sacar cualquier cosa de su baticinto (hasta “espantatiburones”).

Con el empuje que brindó al mundo del cómic la obra de Frank Miller (“The Dark Knight Returns”, para DC Comics, en la que presentaría a un Batman envejecido y retirado, mostrándonos su visión de un cercano futuro ultraviolento y dominado por las corporaciones) llegarían las dos películas de Tim Burton. Batman, de 1989; y Batman regresa, de 1992 levantarían la imagen del personaje, dándole un tono más oscuro en la pantalla grande. Estas significaron un salto significativo hacia una adaptación cinematográfica más realista, alejándose de la visión infantil e inocente anterior, y la película fue un éxito arrasador.


El Batman de Frank Miller
Después, ocurrió algo espantoso… Joel Schumacher arruinó la franquicia con dos películas desastrosas (Batman forever, de 1995, y Batman y Robin, de 1997) que volvieron a poner al personaje fuera del ámbito realístico y lo llevaron al ridículo y la parodia. Estas porquerías forman parte de lo peor del cine basado en cómics.
El Batman de Burton
 
Hizo falta que alguien como Christopher Nolan tomara la posta y creara esta trilogía, para poder darle al personaje el lugar que se merece en el cine. Quizás sea el ejemplo de cuando es verdaderamente necesario un “reinicio” (no fue así el caso con Spiderman, que en su última versión presenta muy buenos efectos especiales, pero existiendo una franquicia reciente del personaje, vuelve a contar toda la historia otra vez, hartando al espectador). Batman Begins (2005) fue un muy buen inicio, que como tal tuvo el trabajo de presentar la historia y los personajes principales. En ocasiones las mejores partes son las segundas, debido a que ya no hay que tomarse el trabajo de explicar muchas cosas ni de dar cierres definitivos; y se da paso a la acción y los eventos principales desde el inicio (tal es el caso de Star Wars: The Empire strikes back, de Irvin Kershner, 1980). The Dark Knight (2008), la segunda parte de la obra de Nolan sobre Batman, es una película excelente, donde la historia, los personajes, el ritmo, los efectos, fueron de un nivel superior a lo que se había visto en el género. La historia, compleja y atrapante, y el tono oscuro y realista de Nolan le dan al film la credibilidad y seriedad que los seguidores del cómic habían estado esperando por mucho tiempo. A esos elementos hay que sumarle la extraordinaria labor de Heath Ledger en su composición del Joker, logrando el contrapunto perfecto con el personaje principal.


Christopher Nolan

 En The Dark Knight Rises, Nolan le da un muy buen cierre a esta excelente trilogía. Luego de haber terminado con la amenaza del Joker y tras un retiro de ocho años, Batman volverá a ponerse su traje para enfrentar a un mercenario implacable que planea destruir Gotham y todos sus ciudadanos. Desde la dirección y la realización en general la película es excelente; así como son increíbles los efectos especiales. 



 

En cuanto a las actuaciones, Christian Bale, Tom Hardy, Gary Oldman, Anne Hathaway, Morgan Freeman, Michael Caine, Marion Cotillard y Joseph Gordon-Levitt están todos muy bien en sus roles, así como el resto de actores secundarios. Tom Hardy compone a un Bane creíble y atrapante, que cautiva al espectador con una presencia y una voz (digitalizada) avasallantes. Hathaway y Cotillard también están muy bien en sus roles, y le dan al film una cuota de belleza y muchísima sensualidad. La historia también es muy interesante, tiene ritmo y complejidad, y está muy unida a las dos partes anteriores, atando cabos y desarrollando también nuevas situaciones. La trama original, de un Bruce Wayne ya retirado, con deficiencias físicas, que vuelve al ruedo y se enfrenta a un contexto criminal aún más violento que el de su pasado (ya presentada en el cómic “The Dark Knight Returns”, de F. Miller) funciona y muy bien aquí. Como comentario aparte: sólo espero que después de tan magnífica obra, no vuelvan a producir un “reinicio”, comenzando toda la historia otra vez (a la Amazing Spiderman…) Sería algo insoportable.

En definitiva, la película está muy buena, y Nolan no decepcionó. No era tarea fácil dar un cierre a esta obra, y el director de ya grandes éxitos como “El origen”, “Memento” y “El gran truco”, se consolida como uno de los más importantes cineastas de los últimos años.


sábado, 28 de julio de 2012

Buena Gente



¿Todos somos buenos y malos en algún punto?
¿Qué es lo que determina que alguien sea "buena gente"?,
¿Se confunde la bondad con el ser políticamente correcto, con ser educado, con poner en práctica valores socialmente aceptados, con tener un caracter débil, con el ser afable?
¿Uno es bueno porque se lo propone, por mandato social, cultural religioso, o simplemente porque le nace serlo?

Creo que uno de los indicadores de que un texto de dramaturgia sea realmente bueno es que a uno lo deje lleno de reflexiones e interrogantes. Este es el caso de "Buena Gente" , la nueva puesta del talentoso director Claudio Tolcachir que se ofrece estos dias en el teatro Liceo.

"Se puede torcer el destino? Si hubieras tomado otra decision... que habría pasado?..." es el leit motiv de esta comedia dramática, una de las más aclamadas del teatro contemporáneo norteamericano, escrita por el ganador del premio Pulitzer David Lindsay - Abaire.

La trama cuenta la historia de Margarita (Mercedes Moran), para quien el cheque de este mes sirve solo para cubrir las cuentas pendientes del mes pasado, donde parece que las cosas solo pueden cambiar con un golpe de suerte en el bingo o la quiniela... y donde acaba de ser despedida una vez mas de su trabajo. A días de ser desalojada y buscando una salida, Margarita se fija en Juan (Gustavo Garzon), un viejo novio de juventud que logró dejar atras el humilde barrio de la infancia y que ahora es un médico de buen pasar económico, un amigo que no ve hace treinta años y que puede ser su pasaporte a una nueva oportunidad. A raiz de este reencuentro, salen a la luz no sólo historias ocultas en los arcones liberadores del tiempo y la lejanía, sino también resentimientos y cuestionamientos, y todo enmarcado por algo que aqueja a todas las sociedades sin importar lo avanzada o progresista que sea, los abismos económico-culturales que separan a las personas dependiendo su posición en la escala social. En el seno de este conflicto y de las situaciones límite que se les plantean, los personajes se cuestionan hasta donde obrar como debe hacerlo una persona que se considere a sí misma "buena gente" y hasta donde no.

Es incuestionable que Fernando Masllorens y Federico Gonzalez del Pino son ya íconos de la traducción y la adaptación de las obras de la dramaturgia extranjera para el mercado local, y aquí hacen gala de su oficio. Su trabajo para trasladar a nuestra idiosincracia la acción de una pieza que originalmente está ambientada en la vida de los suburbios de una ciudad norteamericana es impecable. Pareciera que el texto original hubiera sido escrito originalmente pensando en un barrio humilde de nuestra querida y enigmática Buenos Aires.

Teniendo en sus manos un texto rico y sólido, lleno de humor ácido y plagado de personajes irremediablemente humanos, Claudio Tolcachir (premio Konex, ACE, Maria Guerrero, Teatros del Mundo y Teatro XXI) ofrece una puesta muy interesante, donde tanto escenografia y actores se desplazan entre escena y escena de modo armónico, componiendo lugares, espacios y situaciones. Los actores están en todo momento conectados entre ellos y en ningún momento se ven abandonados por sus personajes, lo que denota un correcto trabajo de dirección. Esto aroja como resultado credibilidad de lo que esta sucediendo en escena.

La dirección de arte y diseño de escenografía, a cargo de Alberto Negrin (premio Konex de Platino al mejor escenografo de los últimos diez años), merece una mención especial. Los elementos con los que eficazmente se ambienta cada momento de la trama (un "todo por dos pesos", el humilde departamento de Margarita, el bingo donde los personajes sueñan con encontrar un giro a su suerte, la casa de country de Juan) aparecen desde cada rincón del escenario y hasta desde las bambalinas de modo sincronizado. Una de las primeras lecciones que una instrucción clásica de teatro brinda es que cada elemento escenográfico debe tener un sentido, debe ser utilizado de algún modo. Dicha lección aquí se cumple al pie de la letra. Cada uno de los elementos esta en ese lugar por algo.

En lo personal, no soy fanático del uso de pantallas e imágenes de fondo en teatro, pero aquí esta alternativa es utilizada de un modo innegablemente efectivo y hasta sutil.

Ya en lo que hace a las actuaciones, cada uno de los actores sale airoso en la composición de su personaje. Todos ellos estan muy bien elegidos para los papeles que componen, y eso es un acierto del casting. Claro que sobre Mercedes Moran recae el peso del protagónico, y no solo sale airosa en la composición de una mujer de vida sacrificada que carga con las decisiones que tomó en su vida y se cuestiona como obrar en una situación límite, sino que actúa de modo tal que permite que sus compañeros de escena se luzcan al encarnar a los personajes que interactuan con ella.

Veronica Llinás, Silvina Sabater y Gerardo Otero ofrecen sólidas interpretaciones como la exhuberante amiga, la casera y el jefe de Margarita, mientras que a Gustavo Garzon se lo ve muy a gusto en el papel de Juan, aquel amigo de la infancia que escapo de un pasado de pobreza que vuelve a chocarse con el de modo inesperado. Aun asi, el trabajo que merece ser destacado es el de Marina Bellati, quien compone a la joven esposa de Juan, quien nacio y vivio siempre en una posicion acomodada, y que, a traves de Margarita, conoce facetas de su marido que la sorprenden de modo no muy grato. Bellati hace su composicion alejada de cualquier estereotipo, maquieta o cliche, simplemente se sumerge en el mundo de una persona que vivio siempre en determinado medio sociocultural y se ve confundida ante un sorpresivo golpe de una realidad que le era ajena.
Todos los actores estan en todo momento inmersos en sus personajes y logran un grado de conexión necesario para recrear las situaciones disímiles que exige la trama.
En definitiva, se trata de una muy buena alternativa de nuestra cartelera porteña para reflexionar acerca de nuestra realidad, de nuestros preconceptos y de nuestras decisiones de vida.

Para culminar, en palabras del autor de la obra:
"Mi infancia fué en un barrio de clase baja. Pero un día recibí una beca en tercer grado para estudiar en una escuela privada de los suburbios. Esta oportunidad de estudio determinó un cambio en mi aparente destino. Fue así que todos los días tomaba solo el tren de ida y vuelta, y al pasar tiempo con mis nuevos compañeros mi acento fue cambiando, mutando, suavizándose. Pero lo curioso es que reaparecía inmediatamente cada vez que hablaba por teléfono con mi madre o con un familiar. De alguna forma, era como ser bilingue. Quise escribir "Buena Gente" recordando y siendo respetuoso a mis orígenes, pero también con todas sus ambiguedades". David Lindsay-Abaire.

domingo, 22 de julio de 2012

Yerma: un Lorca puro



Si de algo tenemos que enorgullecernos los argentinos, y los porteños en particular, es del movimiento teatral que existe en nuestro país. Pocas ciudades en el mundo tienen una cartelera tan variada y copiosa como la nuestra. Hay teatro para todos los gustos y posibilidades económicas, y realmente quien no acude a ver una obra u otro hecho artístico es sencillamente por falta de interés.
Y quien quiera ver teatro clásico, siempre tiene la posibilidad de acudir al San Martín (municipal) o al Cervantes (nacional).
Las obras de teatro clásico no son comerciales, no son de consumo masivo, y no mediando productores que se atrevan a ponerlas en escena, es el Estado el que debe ofrecer la posibilidad a la gente de acudir a ver piezas magistrales eternas como las de Chejov, Ibsen, Bernard Shaw o bien, en el caso de obra que pasaré a comentar, García Lorca. Porque el teatro tiene una función social educacional, y está en nosotros cuidar nuestras salas con soporte estatal. Cómo hacerlo? Acudiéndo a ver las puestas que se presentan en el San Martín y en el Cervantes, que se hacen con presupuesto que en parte todos nosotros aportamos.
Fue ayer muy reconfortante ver la sala del Cervantes llena para ver la puesta que de "Yerma" hizo el director Daniel Suárez Marzal.
Lorca devolvió al mundo del teatro el género de la tragedia, que había sido dejado de lado desde la epoca de la Contrarreforma, a raíz de la cual el hombre se convirtió en el artífice de su propio destino, dejando atrás la concepción del hombre sometido a los designios divinos. Ejemplos de este género de la literatura lorqueana son "La casa de Bernarda Alba", "Bodas de Sangre", "Así que pasen cinco años" y, claro "Yerma", historia que trata más sobre las presiones sociales y el rol de la mujer en un opaco pueblo español que sobre la imposibilidad de tener hijos. Consciente del éxito del drama rural de teatro, Lorca elabora estas tragedias basándose en una conjugación de mito, poesía, y sustancia real, tratando de retratar a una mujer a su vez oprimida y liberadora de sí misma.
El tema principal de la obra en cuestión es instinto frente a represión, ya que Yerma lucha porque su instinto le dice que debe ser madre, pero no lo logra, y por eso termina odiándose. A través de un gesto radical, se libera de la esterilidad de Juan aunque no de su tragedia personal.
La puesta de Suárez Marzal nos brinda un Lorca puro, con enérgica música flamenca, luces ténues con las que se retrata lo lúgubre de la situación y el gris de la vida cotidiana que se llevaba adelante en ese pueblo rural y una escenografía despojada y precisa.
Un telón de fondo de material corrugado muestra un terreno árido, opresivo, seco como el vientre de Yerma. Colores sepia y rojizos utilizados en forma adecuada indican el momento del día en el que la situación se desenvuelve, y unos pocos elementos escenográficos bien empleados permiten recrear cada ambiente. Realmente un logro de la puesta.



El casting en una obra de Lorca es todo un desafío, sobre todo en los roles protagónicos. En el caso en cuestión, debía encontrarse una actriz que logre transmitir el camino de desesperación y locura que recorre Yerma durante el transcurso de la trama.
Sin duda, Malena Solda es una de las actrices más preparadas de su generación, quizá a la par de Eleonora Wexler. Su trabajo aquí no presenta fisuras -mirando, y escuchando (Lorca se escucha además de verse) con ojo muy fino quizá haya algún sesgo de monotonía en la forma en que ponuncia los versos- y sale airosa en la recreación de todos los estados anímicos que impone el personaje.
Sin embargo, y esto es ya una opinión muy personal, creo que el protagónico de esta tragedia requería una actriz con otra presencia dramática. Solda aporta a las criaturas que suele componer una fragilidad que dista de lo que es Yerma.
Yerma sufre, pero no es una víctima. Quizá las víctimas sean aquellos que la rodean. Por ello pienso que tal vez otra actriz con una presencia más fuerte hubiera aportado otra carga al personaje. Más allá de ello, la interpretación es sólida, correcta.
El resto del elenco no desentona. Sergio Surraco brilla como el posesivo señor de casa que intenta mantener la sanidad de su matrimonio y hogar. Las jóvenes que componen a "las lavanderas" y a "las muchachas" conforman un coro que logra una de las escenas más lucidas de la obra.
Por su parte, Tina Serrano encarna a la "Vieja Pagana" pronunciando los versos con la cadencia que requieren, con el oficio y técnica de la "vieja escuela", poniendo en evidencia algo no tan bueno: que hay una nueva generación de actores que, si bien talentosos, no tienen la preparación tradicional en teatro que requería saber "cómo decir" dependiendo del tipo de obra de que se trate. Serrano es la única que "dice" del modo en que se debe en una tragedia lorqueana.
Pepe Monje, como el novio de la adolescencia de Yerma, se ve un tanto deslucido, lo cual es una pena en un actor de probado talento. Esto no es más que un desacierto de la dirección, ya que el papel de "Victor" representa la virilidad, la potencia, lo que no fue para Yerma, convirtiéndose en un elemento sustancial de la historia. Lo que este personaje representa es un denominador común en varias obras del autor, pudiéndose encontrar en el Leonardo de "Bodas de Sangre" o en el Jugador de Rugby de "Así que pasen cinco años". Sin embargo, las participaciones de Monje en la obra pasan casi desapercibidas, carentes de la potencia y tensión sexual que se debería generar en escena.
El cuadro de las brujas, momento en que Yerma busca a través de un ritual oculto lograr la tan ansiada maternidad, está bien resuelto, con elementos escenográficos que otorgan una adecuada ambientación, aunque quizá la bruja se parece más a una matrona de pueblo que a una anciana avezada en las artes arcanas.
Un encanto especial le da a la puesta la música flamenca en vivo con guitarrista (una mención aparte para el talentoso Sebastián Espósito), un cantaor y una llamativa bailaora, luciéndose los tres junto a todo el elenco en la escena que tiene lugar en la romería, mezcla de matrimonio y ritual de iniciación sexual, entre carrozas floridas y símbolos religiosos.
En defintiva, más allá de unos detalles de dirección subsanables, se trata de un Lorca puro, una tragedia sin baches ni mesetas, y una recomendable propuesta en la escena porteña.
"Ay que prado de pena!
Ay qué puerta cerrada a la hermosura,
que pido un hijo que sufrir y el aire
me ofrece dalias de dormida luna!
Estos dos manantiales que yo tengo
de leche tibia, son en la espesura
de mi carne, dos pulsos de caballo,
que hacen latir la rama de mi angustia.
Ay pechos ciegos bajo mi vestido!
Ay palomas sin ojos ni blancura!
Ay que dolor de sangre prisionera
me está clavando avispas en la nuca!
Pero tú has de venir, amor!, mi niño,
porque el agua da sal, la tierra fruta,
y nuestro vientre guarda tiernos hijos
como la nube lleva dulce lluvia".-

domingo, 15 de julio de 2012

EL SORPRENDENTE HOMBRE ARAÑA





Ficha: Dirección: Marc Webb. País: USA. Año: 2012. Duración: 136 min. Género: Acción, fantástico. Interpretación: Andrew Garfield (Peter Parker / Spider-Man), Emma Stone  (Gwen Stacy), Rhys Ifans (Dr. Curt Connors / Lagarto), Martin Sheen (tío Ben), Sally Field (tía May), Denis Leary (capitán Stacy), Campbell Scott  (Richard Parker), Chris Zylka (Flash Thompson), Irrfan Khan (Ratha). Guion: James Vanderbilt; basado en los personajes creados por Steve Ditko y Stan Lee. Producción: Avi Arad, Matthew Tolmach y Laura Ziskin. Música: James Horner. Fotografía: John Schwartzman. Diseño de producción: J. Michael Riva. Vestuario: Kym Barrett.




Sinopsis: El sorprendente Hombre Araña es la historia de Peter Parker (Garfield), un marginado en la preparatoria quien fuera abandonado por sus padres de niño, dejado al cuidado de su tío Ben (Sheen) y su tía May (Field). Como casi todos los adolescentes, Peter está intentando descifrar quién es y cómo llegó a ser la persona que es. Peter también está encontrando su camino con su primer amor de preparatoria, Gwen Stacy (Stone), y juntos, se enfrentan al amor, compromiso y secretos. Luego de que Peter descubre un misterioso portafolio que pertenecía a su padre, empieza una búsqueda para comprender la desaparición de sus padres - llevándolo directamente a Oscorp y al laboraorio del Dr. Curt Connors' (Ifans), el antiguo compañero de su padre. Mientras Spider-Man es puesto en un camino hacia la colisión con el alter-ego de Connor, Lizard, Peter deberá tomar decisiones que cambian la vida para utilizar sus poderes y formar su destino para convertirse en un héroe (cinepremiere.com).



 Andrew Garfield como Peter Parker


Comentario: Los productores de Hollywood poseedores de los derechos de la franquicia Spiderman, decidieron realizar un nuevo film, contando toda la historia de nuevo, con nuevos actores, director y equipo. No es de sorprender: el personaje mueve millones de dólares a través de seguidores que compran sus incontables líneas de cómics y diverso merchandising. Así, era de esperarse la aparición de una nueva película con el personaje, después del éxito de los tres films de Sam Raimi, protagonizados por Tobey Maguire y Kirsten Dunst. Se esperaba que en 2011 se estrenase la cuarta entrega; pero en Enero de 2010 Marvel anunció la cancelación de la película y el cierre de la serie debido a problemas con el guión y la dirección. Inmediatamente se anunció una nueva película que reiniciaría la franquicia. Ahora… ¿hacía falta este reinicio?


 Emma Stone como Gwen Stacy

Personalmente creo que en muy pocos casos se justifica reiniciar una historia. Reiniciar una historia puede significar, simplemente, falta de capacidad e ideas. Por ejemplo, se justifica lo hecho por Christopher Nolan con su trilogía de Batman. Joel Schumacher destruyó lo comenzado por Tim Burton, haciendo dos películas vergonzosas, que forman parte de lo peor visto en el cine y una guía sobre cómo destruir una franquicia. Acaso no haya sido sólo culpa suya, sino de un grupo de productores que deciden qué películas filmar, con qué equipo y con qué temáticas, basándose en las últimas tendencias vistas en ratings y estudios de mercado. Así, a un costo de grandes fortunas se hicieron grandes basuras, que solo sirvieron para darles unos millones de dólares de ganancia a un grupo de productores de California. Aquí, sinceramente, no hacía falta un “relanzamiento”. Las películas de Raimi están plenamente en la memoria de la gente (el tercer film es del 2007) y esto hace que la primer parte de “El sorprendente Hombre-araña” resulte muy pesada. Volvemos a ver ooooootra vez tooooooodaaa la historia sobre cómo Peter Parker es picado por la araña y lo que sucede con sus tíos ooooootra vez… Y oooooootra vez vemos la vida de Parker en la secundaria, y cómo era molestado por sus compañeros, y cómo todo cambia cuando obtiene sus poderes. A los norteamericanos les fascina mostrar una y mil veces el tema del muchacho débil en secundaria, sujeto a burlas constantes y su posterior venganza. Deben saber que es un defecto constante de su sistema educativo, y a la vez una metáfora abarcativa, en la que muchas personas se pueden sentir identificadas. Este es el factor más débil de la película, la repetición.


 El villano de turno, el Lagarto

Todo esto se podría haber obviado y seguido la historia desde donde quedaron las anteriores, o incluso con alguna reformulación (así como hizo Brian Singer con su “Súperman Returns” en 2009), comenzando el film con la historia del origen del personaje ya desarrollada. A pesar de este factor, la película desarrolla luego una historia entretenida (que en realidad es una variación de las anteriores: científico con buenas intenciones que, a través de un experimento fallido se transforma en un monstruo que pone en peligro la ciudad). Esta historia, el drama del Dr. Connors, está bien narrada, con un buen ritmo y desarrollo de principio a fin. Por otra parte, la película está muy bien filmada, bien realizada y se hizo una buena elección de actores. Andrew Garfield y Emma Stone hacen una linda pareja y dan muy buena imagen en pantalla. Rhys Ifans va consolidando su carrera y demostrando que es un gran actor. Para quienes no lo vieron en “Anónimo” (2011, de Roland Emmerich) les recomiendo que no se lo pierdan allí. Martin Sheen, Sally Field y Denis Leary completan el casting principal y están muy bien en sus papeles.
Habiendo dicho todo esto, hay que destacar el factor fundamental sobre el que se planta este film: los efectos especiales son asombrosos. El 3D se disfruta muchísimo y se hace buen uso de efectos de cámara en primera persona (el espectador ve lo que vería Peter Parker al balancearse con su telaraña por los aires); además, se muestra como nunca al trepamuros contornearse en el aire y hacer las más asombrosas piruetas. Además, las escenas de lucha y acción no tienen desperdicio. Quizás en este punto se nota una mejora con respecto a las películas de Raimi: aquellas eran demasiado lentas en comparación con el film de Marc Webb, que le brinda más acción y velocidad a su film. Cabe destacar también el cameo de Stan Lee, acaso el mejor de los que hizo en estos films.
En definitiva, si bien se hace largo y pesado el primer tramo del film, mostrándonos algo que ya se vió hace muy poco (y se había visto bien realizado por Raimi), los efectos especiales en 3D y las escenas de acción, hacen que el film se disfrute bastante. Quizás la próxima película que realice este equipo nos presente una historia nueva, o por lo menos con elementos novedosos que no se basen únicamente en los efectos especiales.

Opinión: BUENA