Mucho revuelo generó hace exactamente un año atrás el anuncio de que HBO iba a producir una película para televisión sobre los entretelones de la campaña presidencial Jhon Mc Cain-Sarah Palin del año 2008, basada en el bestseller "Game Change" de los periodistas John Heilemann y Mark Halperin. Sucede que dicho libro no deja bien parados a los candidatos republicanos, mostrando a la elección de Palin como vicepresidente un acto de total desesperación ante el huracán Obama, y a la en ese entonces gobernadora de Alaska como una persona sumamente desinformada en cuestiones mínimas que hacen al escenario político mundial en general y al de de Estados Unidos en especial.
Las reacciones de los más representativos (para bien o para mal) exponentes del partido conservador estadounidence fueron muy variadas, desde la misma Palin exhortando a sus seguidores a no ver la pelicula en un momento en que la misma no había siquiera terminado su etapa de produccion hasta boicots organizados por gente que trabajo en la campaña en cuestion. Diarios, televisión y redes sociales del país del norte entraron en ebullición cuando se definió el elenco que daría vida a estos personajes de la vida real. El estadounidense medio se sorprendió al saber que la elegida para encarnar a la candidata a vicepresidente era Julianne Moore, cuando la satira que Tina Fey compuso en Saturday Night Live era ya parte de la cultura popular. Y allí se encuentra la explicación de por que se acudió a Moore. Estando la parodia del personaje tan arraigada en el inconsciente colectivo norteamericano (quien no haya visto a Fey satirizar a Palin, puede ver los videos en you tube y pasarse un buen rato) se debía acudir al registro dramático de una de las mejores actrices del momento. El resto de los personajes tambien quedaron en buenas manos. Ed Harris logro el papel del lider del partido republicano, mientras que a Woody Harrelson se le encomendo la tarea de personificar a Steve Schmidt, el jefe de campaña que ve el gran proyecto nacer y desmoronarse en un abrir y cerra de ojos.Y asi surgió Game Change, película para televisión que se convertido en la más vista de HBO en sus últimos ocho años. "...Esta no es una película sobre Sarah Palin. Es una película sobre cómo elegimos a nuestros candidatos...", señaló Julianne Moore la noche de estreno y, luego de verla, lo cierto es que no encuentro mejor definición.La película parte desde el presente, con el jefe de campaña dando una nota periodística sobre qué lo llevó a recomendarle a Mc Cain la elección de Palin como candidata a vicepresidenta, haciendo hincapié en la necesidad de un urgente cambio de estrategia ante el avance del partido democrata (un "game change"), y allí comienza la trama. Entonces se nos muestra sin ningún tipo de maquillaje o lenguaje florentino como se crean los personajes de la politica a los que acudimos con todas nuestras esperanzas de cambio al momento en que entramos en el cuarto oscuro y brindamos nuestro voto. Ya en lo que hace a la película en sí, la trama no pierde el ritmo en ningún momento, y si bien está centrada en Palin como una mujer no preparada para abordar semejante travesía como la elección presidencial de tal potencia mundial (además de mostrarla como carente de la mas mínima idea de la situación sociopolitica de su país, se ve a una mujer al borde del colapso nervioso, con un hijo combatiendo en Irak, otro recién nacido que padece síndrome de down y una hija adolescente embarazada, esta última situacion la comidilla de la prensa), subyacen también otras historias que se conforman en núcleo de la gente que vive para y de la política.El sostén más importante, claro esta, es el talento de los protagonistas. Es realmente un placer ver a Julianne Moore arriesgarse con un personaje real cuya imagen uno puede ver en noticieros, diarios, internet, sátiras de televisión, y salir tan airosa. Uno ya no ve a esa dotada actriz que nos llenó de emocionó en Las Horas, Lejos del Paraíso o el Ocaso de un Amor, sino que ve a Palin. No ve a la actriz haciendo de la gobernadora de Alaska ayudada por maquillaje y efectos especiales, sino que ve a la gobernadora de Alaska, y eso es arte. Basta con prestar atención a su rostro en la escena en que Palin ve a Tina Fey parodiándola por la television nacional o cuando le preguntan sobre temas de política actual que desconoce totalmente para darse cuenta que Moore es una maestra de la sutileza. Momento recomendado para prestar atención es cuando en su primera entrevista de campaña la candidata es preguntada sobre la política que Estados Unidos debía seguir contra Rusia, y ella responde que esta muy preocupada al respecto porque puede ver la costa del país soviético desde la de Alaska.Claro que Ed Harris y Woody Harrelson son grandes actores, y aquí no decepcionan. Aunque, viendo el pelo al huevo, y mas allá de una correcta interpretación, quizá el rígido y casi abatido personaje de Mc Cain no fuera el ideal para un actor del registro de Harris. Se lo ve en momentos un tanto incómodo con su personaje. Quizá demasiado maquillaje, demasiada caracterización, hasta el modo en como camina recreando el andar de su personaje resulta en algún momento fingido. Pero no es mas que una opinion.Si bien no el mejor exponente del thriller político, si se trata de una película entretenida y que deja pensando en lo que hay detrás de las fachadas que nos muestran quienes dirigen el mundo.Buena.
Entrada publicada por Oracle
No hay comentarios:
Publicar un comentario