LA CHICA DEL DRAGÓN TATUADO: Una para yanquis perezosos
FICHA:
Título Original: The Girl With The Dragon Tatoo
Origen: Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, Suecia.
Actores: Daniel Craig, Rooney Mara, Christopher Plummer, Stellan Skarsgard, Robin Wright
Director: David Fincher
Fotografía: Jeff Cronenweth
Guión: Steven Zaillian
Música: Trent Reznor, Atticus Ross
Género: Drama, Policial, Suspenso
Duración: 158 Minutos
Calificación: Apta mayores de 18 años
PEQUEÑA RESEÑA: Mikael Blomkvist es un periodista que busca desaparecer por un tiempo de la vida pública tras ser acusado por difamación. La oportunidad le llega al ser contratado por uno de los industriales más ricos de Suecia, Henrik Vanger, para investigar la desaparición de su amada sobrina Harriet, unos 30 años atrás. Vanger sospecha que fue asesinada por un miembro de su familia.
Paralelamente se desarrolla la historia de Lisbeth Salander, quien trabaja como investigadora de antecedentes y recibe la tarea de investigar justamente a Blomkvist. Es así que los caminos de ambos personajes se cruzan y juntos comenzarán a rastrear una cadena de homicidios desde el pasado hasta el presente, sin poder evitar verse involucrados.
COMENTARIO: La primera vez que escuche que Hollywood iba a producir su propia versión de “Los Hombres que no amaban a las mujeres”, pensé: ¿Para qué? Si la versión original está perfecta. Filmada en su país de origen, con actores suecos, que transmiten la idiosincrasia local sin forzarla. Más allá que Hollywood reconoció un buen producto y se lo apropió, leí por ahí que el espectador norteamericano no está habituado a ver películas subtituladas… sin palabras. Es así que tenemos en las salas de enero “La Chica del Dragón tatuado”.
Además de algún que otro detalle, la película resulta una fotocopia de la original. Y no pretendía ser otra cosa (El libro es el mismo). Por ahí David Fincher dijo que su película se iba a centrar más en la relación entre los personajes principales (Lisbeth Salander y Mikael Blomkvist). La única diferencia que percibí fue un aumento de las escenas con encuentros sexuales entre los personajes principales; lo que atenta contra la construcción del personaje de Lisbeth y todo su pasado, no hay lugar para ésta cuota de romanticismo. Si bien en la película original y en el libro estos encuentros ocurren, responden a una lógica bien diferente. Los personajes están buscando refugio, amparo, contención. En la nueva versión, es pura calentura.
Por otro lado, resultan interesantes los diferentes recursos que se pueden poner en escena cuando hay más presupuesto. En la película original los hechos pasados se narraban a través de fotos viejas, recortes de diarios, el relato de los personajes; en la versión de Hollywood (además de todos estos elementos) se desplegó una parva de actores que representan a los personajes de la familia Vanger en su juventud. Es decir, las situaciones del pasado son directamente actuadas.
Daniel Craig (Mikael Blomkvist), Stellan Skarsgard (Martin Vanger), Christopher Plummer (Henrik Vanger), las actrices secundarias, están todos muy bien. Para mi gusto, la excepción es la actriz principal, Rooney Mara, como Lisbeth Salander. En todas las revistas y notas que anticipaban el estreno de la película, aparecieron frases como “hay que prestarle atención a esta chica”, “no la pierdan de vista”, “la nueva chica mimada de Hollywood”. Me devané los sesos esperando ver esto en la película! Tiene una carita muy angelical, más para vestido de princesas que para Lisbeth Salander. No alcanzaron los tatuajes, los piercing, la boca sucia, ni la ropa negra para encrudecer la imagen de esta chica. Pero no es su culpa. Espero me convenza en algún futuro papel.
Bueno, a fin de cuentas, no cae tan bajo como la versión yanqui de Nueve Reinas, pero chicos, no era necesario!
CALIFICACIÓN: BUENA
Comentario aparte: El cine y el doblaje
El idioma original en que fue filmada una película, acompaña los gestos de los actores. Los vulgarismos, la jerga, pausas, la fonética, los recursos y la voz del actor, enriquecen aquello que se expresa. Entiendo que el cine para niños deba ser doblado, porque muchos no han aprendido aún a leer; pero aún así las películas de animación deberían estar disponibles en su idioma original, lo que en la cartelera local no pasa (Y hay que esperar hasta el estreno en DVD). Esta desidia por el cine en su idioma original, tan natural en España o Norteamérica, parece avanzar por momentos en Argentina, pero aún hay un público que resiste. Dos temas alarman, uno es la cada vez más abundante oferta televisiva de canales con toda la grilla doblada. Hace muy poco tiempo Cinecanal anunció “Todas las películas en tu idioma” (nooooooooo!!!). Otro es la distribución de las cintas dobladas y en su idioma original: si vas a un cine de Zona Oeste, va a ser más difícil que consigas ver una película en su idioma original.
Ni hablar de las traducciones que sufren los títulos de las películas, queda para la próxima… pero piensen que le pagan a alguien para que invente masacres como “La Jungla de Cristal” (Die Hard/Duro de matar).
Coincido definitivamente y en todo. La reversion yanqui cae en lo mismo de siempre: exacerbar escenas de sexo y acción en detrimento de la elaboración de los personajes (el caso mas obvio y repelente es el de las remakes de Tom Cuise, que se empeña en destrozar excelentes historia e interpretaciones previas).
ResponderEliminarEn éste caso, como en muchisimos otros, prefiero 10 mil veces la version original de "los hombres que no amaban a las mujeres". Si bien los actores de ésta no son carilindos y sensuales (situación inaceptable para hollywood) el film (y la trilogía, por cierto) tiene un trama maravillosamente desarrollada y excelentes actuaciones. De hecho en la version hollywoodense me pareció que se diluía y perdía en ocasianes el proceso de investigación y deducción de Mike Blomkvist, así como la lucidez de Lisbeth. Si no fuera porque vi la versión original creo que no me habría enterado del meollo de la trama detectivesca. LADY GITTY.
También coincido... se realizó para aprovechar una buena historia y su boom literario; se buscó un buen director y se hizo onda Hollywood: todo porque los norteamericanos no son capaces de ver un film con subtítulos. En este caso, se pierde muchísimo. Recomiendo los films originales.
ResponderEliminar